“Querrán ponerle nombre”
Se encontrarán
el tiempo y el olvido
en un ángulo recto,
en un espacio silencioso y solo
donde el vértigo se hace
con la línea que deshace la memoria.
Llegarán cada uno por un lado,
el olvido
con las horas muertas en los brazos
y el tiempo
con los recuerdos por morir.
No habrá lugar allí para ninguno,
desde el vértice verán
la extensión blanquísima
donde desaparecen blanquísimos
los sueños.
sin asco lo verán,
sin sorpresa y sin asco,
sólo un tenue dolor que se insinúa.
Y querrán ponerle nombre.
el tiempo y el olvido
en un ángulo recto,
en un espacio silencioso y solo
donde el vértigo se hace
con la línea que deshace la memoria.
Llegarán cada uno por un lado,
el olvido
con las horas muertas en los brazos
y el tiempo
con los recuerdos por morir.
No habrá lugar allí para ninguno,
desde el vértice verán
la extensión blanquísima
donde desaparecen blanquísimos
los sueños.
sin asco lo verán,
sin sorpresa y sin asco,
sólo un tenue dolor que se insinúa.
Y querrán ponerle nombre.
Automutilación
No tiene
sino un surco
en la espalda.
Un tajo.
Allí
donde dio cobijo a un sueño.
No tiene dolor
sino memoria
del espanto.
Un hueco
y el recuerdo de su mano
asistida de furias.
sino un surco
en la espalda.
Un tajo.
Allí
donde dio cobijo a un sueño.
No tiene dolor
sino memoria
del espanto.
Un hueco
y el recuerdo de su mano
asistida de furias.
Si la mar engaña
A Juan
Habladora la mar, habladora:
puso a mis píes diecisiete caracolas
y nada me dijeron.
¿A quién puedo pedir que me resuelva
la palabra instante?
Sé que hasta aquí me trajo el azar,
el color de tus ojos es regalo de dioses
que yo no conozco.
¿Diecisiete días
hacen un instante?
:pregunto a la mar
y a tus dioses.
Habladora la mar, habladora:
puso a mis píes diecisiete caracolas
y nada me dijeron.
¿A quién puedo pedir que me resuelva
la palabra instante?
Sé que hasta aquí me trajo el azar,
el color de tus ojos es regalo de dioses
que yo no conozco.
¿Diecisiete días
hacen un instante?
:pregunto a la mar
y a tus dioses.
Matar al ángel
Nadie escapa
a la desmesura de la rosa.
a la desmesura de la rosa.
Poema
Conozco el perfil
de la distancia
agazapada en rostros íntimos
el acto de ocultarse
la delata.
Es mi ojo
el que pregunta.
de la distancia
agazapada en rostros íntimos
el acto de ocultarse
la delata.
Es mi ojo
el que pregunta.
A CORTA DISTANCIA
Levantaron altísimas paredes
-con dudosa intención-
y el tiempo quedó fuera.
Edificaron el abismo hacia lo alto
-esto hicieron por mí- .
¿Cómo no sentir vértigo
si me hablas del mar?
Deja a mis ojos
que se duelan
de ver de cerca el muro
tapar la tarde.
A JOSÉ COUSO
Nadie nos dijo
que la desolación llevaría tu nombre.
¿Hacia dónde mirar?
¿En qué rincón podremos amamantar esta tristeza tan recién nacida?
Nadie nos dijo que el dolor nos vencería en tu perfil.
¿Dónde encontraremos un lugar para el llanto después de haber mirado la boca del cañón que te miró
y miraste?
¿Dónde?
¿Dónde, cuando sólo nos queda
el hueco que anidó un disparo?
Nadie nos dijo
que con tu sonrisa se contaría la historia.
Tinta desolada que reescribe Bagdad.
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