Horizonte del ser
………………………………….. A Raúl Gustavo Aguirre
(El tiempo es la luz que se desgasta
el universo que se simplifica
la violencia que se dispersa
la verdad que se asienta y vuelve a su principio.)
Nos lleva ese tiempo que llevamos en nosotros.
Se lleva a sí mismo el porvenir que da vueltas en el aire.
Nos llevan los olvidos
…………………………………….. la memoria nos lleva.
Nos llevan esos ojos que nos hacen
y los recuerdos que nos perfeccionan
y el mar que nos pregunta
……………………………………………la espuma que contesta.
Quedan sólo los meses más desgarrados que la lluvia
más pérfidos que los obuses del enemigo
más sutiles que los ardides del invierno.
Y sobre las grandes algas que imitan la vida
una espiral de tierra y humo ocupa el lugar que ocupabas.
Son el fragante atropello del tiempo
la leve presión del aire en los pulmones
el peso de la luz que asedia nuestra piel hasta quebrarla
la corteza porosa de un mundo que destila su nada.
Sólo queda una arruga sobre el tiempo
un deber en los ojos
un ardor en la voz
esta tarde clavada por las puntas en el día tenaz
al extremo de un año que se aferra a nosotros
para no morir:
la tranquila obsecuencia de un planeta sin fama.
Nos llevan entretanto los embriones del tiempo debajo
……….de la tierra.
Nos llevan los andenes
……………………………………….. las dársenas nos llevan.
Nos lleva lo que pasa y lo que permanece.
Nos llevan otras vidas que también son nuestras
nos lleva el sol
…………………………la sal
………………………………….. las aguas que nos
……………………………………………………………………llevan.
Y sobre los grandes terrenos ganados al día
una mirada dice:
…………………………….. ADIOS.
De Canto Rodado, 1962.
Tomado de:
https://www.abisiniareview.com/mis-tres-poemas-argentinos-segun-jorge-boccanera/
50 años y sus noches
Difícil es hablar de uno en un poema
difícil es porque hay tantas cosas
tantas cosas afuera
que no nos dan respiro
que no nos dejan solos
que no nos dejan nunca.
Hoy me escribo a mi mismo sin embargo
en nombres de mis muertos y de sus hijos muertos
y de los que sobreviven y nos sobrevivirán.
Durante tanto tiempo fuimos jóvenes
que cuesta envejecer.
Los soles son los mismos
son los mismos los sueños
los mismos vientos soplan sobre los mismos ojos
las mismas aguas corren bajo los mismos puentes
el amor es el mismo
el mar las lluvias son iguales que siempre
pero todo es lo mismo tan sólo para uno.
A la mirada de los otros todo es diferente.
Ya no están los amigos
han viajado a otros reinos y otros territorios
la amistad fue hacer cosas
la exaltación y el verbo.
Ya no es lo que era.
La pasión es la misma
pero el viejo paisaje ha perdido sus brillos.
Aprendí mientras tanto que a vida es el justo equilibrio
entre la eternidad y el instante
entre el espíritu y la materia
entre el azar y la fatalidad
y que somos nada más que el producto
de miles de millones de años de paciencia
de combustión y esfuerzo:
la precaria victoria en la terrible lucha
con la nada.
Cruzamos fugazmente por la escena
donde por un momento cambiamos algún rasgo
agregamos un rito
algún acento
para poder así incorporarnos.
Vi que nada es superfluo
que cada vida viene para cumplir su ciclo
de estupores y éxtasis
de deslumbramientos y descubrimientos
para dejar después que otras vidas
repitan el mismo juego con la misma pasión
y el mismo asombro.
Sé que hay un instante en que cada cosa
se detiene
entra en ebullición y resplandece
se difunde y confunde con todo lo demás.
Es cuando el centro del universo gira
se acelera
fulgura
y se detiene allí donde está uno.
Y si llegamos a alcanzar el sentido del todo
si logramos vibrar con las cosas
y también con los otros
si nos fundimos un instante con la palpitación elemental
del mundo
puede decirse entonces que no hemos vivido en vano
que no hemos participado nada más que en un sueño.
Tomado de:
https://cainabella.blogspot.com/2017/11/alberto-vanasco-50-anos-y-sus-noches.html
San Salvador de Jujuy
Aquí es la siesta del cobre
y la tarde del agua.
Aquí el ombligo del mundo se cubre de ternura.
Y el tiempo se dilata hasta tocar sus bordes
y el aire suena hasta volverse vidrio
y la luz se adelgaza hasta entrar en las rocas.
El glaciar se alejó dejándote estas piedras que los siglos y las
aguas lamen
y este nudo de cauces
que te ata a las cumbres.
Rabia del sexo
Una rodaja espesa pone su ardor en lo más alto
y hace estirar de pronto las aletas del día
Fragua nocturno
Las cosas que me dice
Rabia del sexo
abriéndose paso como un oleaje tenso
como una herida larga que reconstruye su
semblante
obstinado
despierta a la impotencia de un sueño más
profundo
y se atraviesa en el golpe incansable de cada
noche
en la ternura hermosa que vigila en las tardes
en el lamparón de fuego de la mañana
y al sol del mediodía.
Taladora sin nombre
Las
cosas que le oigo
Yunque nocturno
donde se fraguan mis mejores intenciones
en el mundo cubierto del delirio de la fiebre
de octubre
en la mujer rellena por el brillo dispuesto a
protegerte
en la adolescente que cruza por nosotros sin
tocar en el
suelo
en la mujer ardua y dura que ensucia las
mañanas
en la madre tía hermana prendidas de tu ropa.
Encendedora inútil
que todo lo propone
madera destronada
y estéril
disuelta
entre las
nubes.
Tomado de:
https://www.radiokermes.com/noticias/8714-puro-verso-canto-rodado
Arte poética
Si el poema no sirve para imponer al nombre de las cosas
otro nombre y a su silencio otro silencio,
si no sirve para hender el día
en dos mitades como otros dos días relucientes
y para decir a cada uno
lo que cada uno quiere o necesita
o no se ha dicho nunca a sí mismo.
Si el poema no sirve para que el amigo o la amiga
entren en él como en un amplio recinto
y se sienten a conversar largamente con un vaso
de vino en la mano
sobre las raíces del tiempo o el sabor del coraje
o de lo que tardan en llegar este año los fríos.
Si el poema no sirve para quitarle el sueño a un canalla
o ayudar a dormir al inocente,
si es inútil para el deseo y el asombro,
para la memoria o el olvido.
Si el poema no sirve para hacer del que escucha
un fanático
que el poeta se calle.
Ella en general
de buena fuente sé que tu sonrisa estalla como
los frutos
que tu nombre resuena como las declinaciones más
antiguas
que en ti todo se excede como el año se vuelca
que los días te siguen hasta hacerte volar
que tu boca es más suave que los saltos del universo
más dulce que la memoria de las primas que tanto
hemos amado
es en tus ojos donde la luz desata sus mares
es por ti que el mar reanuda su juego
es en tu voz donde la noche amansa sus vientos
propicios
y es en el centro de tu risa donde el día ordena sus
mástiles
es a ti a quien la mañana dedica su empeño
a quien prefiere la línea del mediodía
por quien se preparan los hábitos del anochecer
es por ti que cada nombre ha clavado sus anclas
y por quien el año alberga demasiado optimismo
es en tu corazón donde madura lo que está por venir
Tomado de:
https://blogdelamasijo.blogspot.com/2009/10/alberto-vanasco-arte-poetica.html
A mi hijo...
Las únicas virtudes de tu padre son
algunas pocas cosas que nunca hizo.
Sus únicas culpas: otras muchas cosas que dejó de hacer.
En el terreno de lo hecho sólo unas cuantas sombras
varillas confusas
pasiones como nada.
Y en el tiempo
sólo tu
sonrisa que arde
sólo un gran
amor que se arraigó
sólo algún
poema que respira.
Esto en cuanto a mí..
Y para tus años
la cal viva de la alegría
el préstamo lustroso del porvenir
la estridencia de las cosas
el calor y el temblor de otros hombres
y la luz con que nosotros soñamos.
Hay en el contorno del mundo
una lámina de
fuego que todo hombre
puede pisar.
Hay en el agua de todos los mares una gota de sombra
que todo
hombre debe beber.
Hay en el espacio una campanada perdida
que todo
hombre se sienta a escuchar.
Por esa lámina
con esa gota
en esa campanada se vive.
Tomado de:
https://blogdelamasijo.blogspot.com/2013/03/alberto-vanasco-mi-hijo.html