AÑO NUEVO
¿Quién me protegerá
de mí mismo? Hago votos
y levanto mi copa en medio del desorden
para que nuestro amor persista, al menos,
un año más. Dolor de cabeza e intestinos
revueltos. Soledad
enconada, tal vez, irredimible.
¿Vida nueva?
Tranquilo...
Sin trabajo, con pocas
expectativas de dinero, dando
palmadas al compás de la marcha Radetzky.
(de: Los dones suficientes - Edit. Pre-Textos, 2000)
Tomado de:
http://susanabenet.blogspot.com/2017/01/poema-de-jose-luis-parra.html
ADIEU VIVE CLARTÉ
A Antonio Cabrera
Con qué dulzura expira este verano
de corteses tormentas y turbias claridades,
y qué melancolía
no haber sabido aprovechar su regalada plenitud,
aunque el otoño, con pausada cadencia,
no menos pleno y sosegado se presiente.
En el confín de la orfandad,
cimas y abismos, que tanto me elevaron
y me hundieron,
por fin caminan
juntos
en una extraña e inquietante calma.
Ah concordia tardía,
la alegría y la desesperación
son ya casi lo mismo.
SENTIMIENTO OCEÁNICO
A José Luis Martínez
Nunca estuve del mar
tan cerca
como en aquel crepúsculo desierto,
en una playa
donde sólo chillaban las gaviotas,
aquella tarde tan lejana,
era a principios de un otoño,
en que nadando
y sin saberlo
-el fragor de las olas, las gaviotas-
me iba adentrando
en el vientre tranquilo de mi madre.
—-
Del
libro «Cimas y abismos» Antología poética. Selección y prólogo de Antonio
Cabrera. Renacimiento. Sevilla, 2012.
Tomado de:
EL ANARQUISTA
A
Severino Di Giovanni
Cayó la frase
como una guillotina
amputándole al cielo
la claridad del día.
Se hizo noche,
se puso oscuro,
se hizo noche
su rostro duro.
Noche negra
de negros augurios
vigilia larga
pensamientos turbios.
Cayó la frase
de muerte, temible,
sacudió con golpe
de fuerza terrible.
Lo encontró de pie,
casi listo,
preparado en sus ideas.
Lo fusilaron allí mismo,
ahogando su grito de guerra:
¡Viva la Anarquía!
IMÁGENES DE UN SUICIDIO
Tenía majestad aquel silencio.
Desde la orilla, poco a poco,
se adentró en lo profundo.
Círculos en el agua...
Esa perturbación tan sólo.
Y muy tenue, apenas perceptible
-pero qué redención más honda-,
se oyó piar a un pájaro
entre los juncos.
Tomado de:
http://www.antoniomiranda.com.br/iberoamerica/espanha/jose_luis_parra.html
BODEGÓN DE UNA NOCHE DE VERANO
Cómo se arrugan, sigilosas,
imperceptiblemente,
las peras, las manzanas,
en el cristal imperturbable; cómo
se mancha y ennegrece el amarillo
de los plátanos
y se ablanda
la pulpa, el fulgor de las cerezas…
Si fueran más agudos tus sentidos
sin duda escucharías,
en esta quieta noche de verano,
el incesante juego de la muerte
incluso en la aparente consistencia
del frutero.
Y
tú aquí, sudoroso,
medio desnudo,
fumando sin sosiego en la cocina;
tú aquí, presa rendida, ya atrapado
por los feroces lebreles del tiempo;
tú aquí,
coronando sin gloria esta sombría
naturaleza muerta.
INCLINÁNDOME
Inclinándome, sí,
al clima de los años, al peso de las ruinas
de la carne, encorvado en mis carencias,
como el sauce que roza en la corriente
el reflejo fugaz de lo vivido.
Inclinándome, sí,
con reverencia, agradeciendo
la presencia del escaso auditorio,
el temple y alegrías que me han dado
en esta feria bufa, ignominiosa.
Inclinándome, sí,
ante el misterio y su verdad ambigua
y su belleza fugitiva y ciega,
no con rendida servidumbre
sino con refinada cortesía.
Y cuando la certeza al fin se imponga
de que no habrá más horas ni más días,
salir como una sombra
salir, pero inclinándome,
salir sin titubeos de la escena.
"Anunciación del aire" ha sido publicado
recientemente por la editorial Frailejón de Colombia.
Tomado de:
http://joseantoniofs.blogspot.com/2016/10/dos-poemas-de-jose-luis-parra.html
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