Lentamente, él se acostumbraba…
Lentamente, él se acostumbraba a que ella dejara, olvidara
cosas
en su casa.
Cerillos, un pañuelo cuando lloró, una
bufanda de sus hijos, sus guantes, sus anteojos a veces.
Él, en general, dormía cuando ella se iba, estaba cansado.
Sabía que ella se quedaba ahí, en su casa, fumando
cigarrillos y
[pensando en Dios sabe qué.
Por la mañana descubría los objetos olvidados.
Ella no dejaba de olvidar y dejar cosas en su casa.
Su brasier.
Sus cigarrillos.
Su encendedor, un libro para niños.
Su estuche de anteojos
Sus sandalias
(De seguro regresaba descalza)
Sus pañuelos
Su cabello, sobre todo su cabello
Estaba por todos lados, su cabello
En la almohada, en el cuarto de baño, en la cocina.
Una verdadera pesadilla.
Su cabello negro, en todas partes, en todo el
departamento.
La última vez, olvidó sus manos.
Dos manos sin anillos, posadas sobre el borde de la mesa,
inmóviles, sangrando un poco en los puños donde ella las
había
cercenado.
No morir…
No morir
todavía no
demasiado pronto el cuchillo
el veneno, demasiado pronto
Todavía me amo
Amo mis manos que fuman
que escriben
Que sostienen el cigarrillo
La pluma
La copa.
Amo mis manos que tiemblan
que limpian a pesar de todo
que se mueven
Las uñas todavía crecen
mis manos
acomodan los anteojos en su sitio
para que yo escriba
De Clous (Zoé, 2016)
Versiones del francés de Mónica Mansour
Tomado de:
https://luvina.com.mx/dos-poemas-agota-kristof/
INCLUSO TÚ
La luz se apagó
nada tiene sentido
sin forma las figuras se alargan
hasta mi corazón que ahora
pronuncia la
palabra
que entre golpes y miedos
no podía pronunciar
En las inmóviles calles sin vida
un hombre caminaba bajo la lluvia
y lloraba, recuerdas.
Dónde has terminado amor mío
no me atrevo a mirarte
así de dura es la distancia
entre los dos
y sin embargo te sigo buscando
Negra y amorfa
camino por la ciudad
de quienes son felices en pueblos
majestuosamente silenciosos
donde nadie me conoce
me detengo en umbrales extraños
y apoyo la frente en puertas cerradas
En las inmóviles calles sin vida
un hombre caminaba bajo la lluvia y lloraba
Recuerdas nuestras dudas
Las tardes blancas y silenciosas
se alejaban volando
y me sentaba en los bancos de siempre
mirando el agua segura
de que incluso tú te habías marchado.
Tomado de:
https://prodavinci.com/agota-kristof-clavos-poesia-completa/
Todavía no
No morir
todavía no
demasiado pronto el cuchillo
el veneno, demasiado pronto
Todavía me amo
Amo mis manos que fuman
que escriben
que sostienen el cigarro
la pluma
la copa
Amo mis manos que tiemblan
que limpian pese a todo
que se mueven
Las uñas crecen aún
Mis manos
que me ponen las gafas en su sitio
para que escriba
Tomado de:
http://zumo-de-poesia.blogspot.com/2020/01/todavia-no-por-agota-kristof.html
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