RABIA AJENA
No quedó nada de mí,
con excepción del disgusto,
tiene un principio y un final
determinado,
a excepción de la ira,
Esa no es mi historia, la digo así desde el
principio,
como digo en mi ciudad,
tan feliz esta mañana
Hasta la noche, mucha más felicidad, mucha más,
que no es mía, repito, porque aún más dentro de
mí empiezo a querer morir,
y después de la rabia, mucho después, o no tan
después, choca pensar que
volverá de nuevo
la rabia o el asco,
de ahora en adelante, por casualidad,
se fue de mí, se fue de todos, de vuelta al
principio,
de vuelta y más atrás, se fue, empezó,
y así termina.
PRONTO
REALIDAD TEÓRICA
Poesía y ciencia
son las mismas
matemáticas del significado.
REALIDAD TEÓRICA
Poesía y ciencia
son lo mismo
Matemáticas del significado.
UN POEMA
Tú, cuyas manos me bañaron
en fuego transparente sobre mi espalda,
cuyos ojos en claros destrozos traspasaron
algunos principios elementales de mi alma,
fuiste mi patria.
Tú, que no tienes apellido,
que si fueras pájaro o si fueras alcándara,
que de todos ustedes arma las letras de pluma
cayéndose se han ido, como si fueran vanas nuevas,
ustedes son mis sacerdotes
y mi patria.
Tú, que no te quedes de donde
Solías orar por las nubes blancas,
la de tantos amores que tienes confundidos
el nombre de todos los días de cada semana,
Vosotros sois mis dioses
y mis sacerdotes
y mi patria.
Tú que besas tan dulcemente
que el cielo bocado se va soltando,
y que no sabíamos cuál era la lengua,
cuál era la saliva, de pura sabiduría y templada,
vosotros erais mis leyes
y mis dioses
y mis sacerdotes
y mi patria.
Tú que paciente calaveras
Por las praderas del África verde
y los leones rojos, las flechas del pasto,
las rosas de leche de la luna de Nuruquimagua,
sois mi ejército
y mis amantes
y mis Dioses.
y mis sacerdotes
y mi patria.
Vosotros sois mi ejército y mis leyes
y mis Dioses y mis sacerdotes y mi patria,
y el ejército y los Dioses y mis leyes y todas
las patrias y sacerdotes creen que no sois nada:
que no sois nada.
Tomado de:
http://www.antoniomiranda.com.br/iberoamerica/espanha/agustin_garcia_calvo.html
Sereno estoy
Sereno estoy como la mar
serena.
Acude, amiga, a sollozar
tu pena.
No sepa ni diga
mi amiga carnal
que tiene el corazón
de sal.
Sereno estoy como la noche
serena:
¡Qué tiempo, amiga, qué derroche
de arena!
No espere ni quiera
mi amor la fortuna
de que en su pozo caiga
la luna.
Sereno estoy si tú lo estás
(serena).
Si yo soy bueno, tú eres más
que buena.
No esperes ni quieras,
amor; y llorar,
así como la noche
y el mar.
Pensé que estaba buscando
moras
y encontré la zarza.
Pensé que estaba cortando
la rosa blanca,
y la espina se me clavó en las venas.
Pensé
que saldría clavel caliente,
y salió un chorro de leche.
Creí que el arroyo
se hundía en la tierra
y desembocaba en el océano verde.
Pensé que era
el Océano verde
y era el eterno río de estrellas.
Pensé encontrar,
cruzando el cielo,
al Señor del todo y de la nada.
Y sólo encontré
un puñado de moras
que sangraban de amor en mi mano.
Balada estival de las cárceles madrileñas. 1968
En la trena lo tienen aún
a Jaime la prenda
de la buena compañía
en chirona está Paco Gil
que así se sonreía
y Miguel en Carabanchel
y en las Ventas las tres Marías
para Izquierdo, Aldecoa y Giral
y Emilio y David
son número los días
y también a la sombra está
Josefa García.
Los jueces como es natural
se van a la Toja
o si no a Fuenterrabía
su permiso irá a disfrutar
el blanco policía
la justicia descansa al sol
pero no muere todavía
mariscales, ministros y Dios
tostándose están
las panzas respectivas
y también a la sombra está
Josefa García.
La señora que va de bazar
jarrones, visillos
sábanas, mantelerías
la empleada el sábado al fin
el tren de cercanías
cada cual en su condición
todo el mundo a vivir su vida
y en el apartamento dos mil
con yelo y con yin
el disco se vacía
y también a la sombra está
Josefa García.
No están ni por fu, ni por fa
ni culpa ni causa
ni pasión ni ideología
sino porque guerra, la paz
porque la noche, día
por la misma razón que aún
cruje el arco y gime la lira
el peón que quedó sin jornal
aquella que ya
más flores no le envían
y por eso a la sombra está
Josefa García.
Porque llaman amor a la ley
y ley a la fuerza
y verdad a la mentira
y por eso el sol sabe a hiel
y el pan a cobardía
y los libros a muerto y
a sin sal la sabiduría
y los besos de hombre y mujer
a cal y el amor
a reja y celosía
desde que ella a la sombra está
Josefa García.
En el patio central del penal
hay una morera
que florece a mediodía
de palabra al vuelo que va
por esas galerías:
"Libertad no sabéis lo que es
pero sí penitenciaría".
El que quiera romper la prisión
que encuentre la luz
negando cielo arriba
que en el cielo Dios ya la sombra está
Josefa García.
Tomado de:
https://antologiapoeticamultimedia.blogspot.com/p/poemas-iii.html
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