“Hamlet,
si
tú vivieras en Viet Nam
no
sostendrías en tus manos
una
calavera.
…
A Nixon no le gusta
este
seso filosófico,
en
sus designios
de
exterminación total,
…
no se contenta
con
dejar sin destruir
hasta
los huesos
de
los dedos”.
@Che
Lan Vien
Huyendo de los merodeadores
El
mercado se dispersó cuando se escucharon los cañones occidentales.
¡Un
movimiento equivocado causó la repentina pérdida del juego estratégico!
Aterrados,
los niños salieron corriendo de las casas
y
los pájaros, con sus nidos destruidos, volaron sin rumbo fijo.
La
riqueza de Ben Nghe explotó como burbujas de espuma,
y
las casas en Dong Nai se hicieron humo.
¿Dónde
estaban todos los héroes que sofocaban a los rebeldes?
¿Por
qué dejas que los pobres ciudadanos sufran esta horrible experiencia?
El caracol
Mis
padres han traído un caracol,
noche
y día entre la hierba maloliente.
Si
me amas, quítame la cáscara,
no
meneas mi pequeño agujero, por favor.
Garganta de Ba Doi
Una
garganta, una garganta, y sin embargo, la misma garganta vieja.
Elogie
a quienquiera que haya sacado esta escena:
una
caverna escabrosa con un arco rechoncho,
y
ricas rocas verdes cubiertas de algas.
Ahora
sopla el viento fuerte, agitando ramas de pino.
Gotas
de rocío goteando de las hojas de sauce.
Tú
que eres virtuoso, o santo, que no has intentado,
incluso
con las rodillas débiles, los pies agotados, para montarlo?
Un embarazo no planificado
Mi
ceder dio lugar a este lío.
¿No
te das cuenta de mi angustia?
Aunque
el destino nunca levantó la cabeza,
hay
un golpe en el árbol de sauce. *
Es
un vínculo de un siglo, ¿recuerdas?
Esta
carga de amor voy a estar cargando.
Cualesquiera
que sean las opiniones del mundo,
tener
hijos, sin esposo,
es
una hazaña muy agradable.
Un hermafrodita
¿Qué
pelea entre doce comadronas hizo
que
tiraran tu cosa de amor?
Al
diablo con ese ratón chirriante.
Al
diablo con esa avispa zumbada.
¿Quién
sabe si es suave o con baches?
¿Quién
puede decir si es tallo o brote?
Sea
lo que sea, debe hacer.
Nunca
serás llamada puta.
Una casa de té en la carretera
Inclinados,
contemplando un paisaje tembloroso:
un
camino sinuoso, una casa de té tambaleante,
una
choza con techo de paja, irregular, patética,
una
viga de bambú escuálida y rallada,
tres
grupos de árboles, inclinados, coquetos,
un
arroyo verde esmeralda, escasa hierba.
Placer,
me olvido de mis viejas preocupaciones.
Mira:
la cometa de alguien está en espiral.
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