sábado, 1 de enero de 2022

POEMAS DE JOACHIM DU BELLAY A 462 AÑOS DE SU MUERTE

 



Esos cabellos de oro los lazos son, Señora...

 

Esos cabellos de oro los lazos son, Señora,

en los que fue al principio mi libertad tenida;

amor prendió su llama por todo el corazón,

y esos ojos fueron el rayo que atravesó mi vida.

 

Fuertes los nudos son, la llama áspera y viva,

la saeta, de mano a tirar aguerrida,

y con todo, amo, adoro y quiero

a la que me estrecha, me quema y lastima.

 

Para romper entonces, apagar o curar

el duro lazo, el ardor o la herida,

no quiero hierro, licor ni medicina:

 

La dicha y el placer que en sucumbir recibo

de tal mano, no permiten que intente

ni cortante puñal, ni frialdad, ni pítima.

 

De "L'Olive" 1549

Visor 1985

Versión de Luis Antonio de Villena

Feliz quien tras la muerte se le sigue la gloria...

 

Feliz quien tras la muerte se le sigue la gloria,

y aún muy más feliz si la inmortalidad

para él no principia con la posteridad

sino que antes de la muerte ya fascina su alma.

 

Tú gozas, Ronsard mío, incluso ahora en vida,

del inmortal honor que mucho has merecido:

y aun antes de morir (felicidad bien rara)

tu muy feliz virtud triunfa de las envidias.

 

Ánimo pues, Ronsard, que la victoria es tuya,

y de tu lado tienes el favor de tu rey:

De victorioso laurel ya coronan tus sienes,

 

y ya la espesa turba alrededor de ti

semeja a esos espíritus que en el ínfero un día

rodearon al tracio sacerdote de gran sobrepelliz.

 

Nota del traductor:

Soneto obviamente dedicado a la gloria de Ronsard. Pierre de

Ronsard (1524-1585), dos años menor que Du Bellay, fue en seguida

considerado como jefe de fila de "La Pléiade".

 

De "Les Regrets" 1558

Visor 1985

Versión de Luis Antonio de Villena

 

 

¡Hermosos cabellos plateados, dulcemente revueltos!...

 

¡Hermosos cabellos plateados, dulcemente revueltos!

¡Frente serena y rizada! ¡Y tú, faz toda de oro!

¡Ojos de cristal hermosos! ¡Grande boca honorada,

que con ancho repliegue levantas tus extremos!

 

¡Lindos dientes de ébano! ¡Oh tesoros preciosos,

que con sonreír solo enamoráis al alma!

¡Damasquina garganta con cien pliegues ornada!

¡Y vosotros pezones, dignos de tan gran cuerpo!

 

¡Bellas uñas doradas! ¡Mano rolliza y breve!¡

¡Oh muslo delicado! ¡Y vos, redondas piernas!

¡Y eso que honestamente a nombrar ni me atrevo!

 

¡Bello y transparente cuerpo! ¡Miembros de vidrio bello!

¡Oh, beldades divinas! Perdonadme, os lo ruego,

si, pues que soy mortal, a amaros no me atrevo.

 

De "Les Regrets" 1558

Visor 1985

Versión de Luis Antonio de Villena

 

Nota del traductor:

Soneto paródico. Du Bellay distorsiona e invierte el tono y los topoi

habituales en la poesía petrarquista. En esto (que llevaron más lejos

Quevedo o Lope de Vega, por ejemplo) Du Bellay es barroco o mejor

-por su modo- manierista. Ciertas distorsiones de la amada petrarquista

la recuerdan, en pintura, a los retratos-bodegones de Giuseppe Arcimboldo,

contemporáneo de nuestro autor.

 

 

Los que están enamorados, cantarán sus amores...

 

Los que están enamorados, cantarán sus amores,

los que buscan honor, cantarán de la gloria,

los que están junto al Rey dirán de su victoria,

los que son cortesanos ensalzarán favores:

 

Los que gustan de artes, hablarán de sus ciencias,

los que son virtuosos se harán tomar por tales,

los que frecuentan vino, parlotearán de vinos,

los que viven en ocio, escribirán las fábulas,

 

los que son maldicientes irán a maldecir,

los menos enojosos hablarán de reír,

los que son más valientes pregonarán hazañas,

 

y los que se estiman mucho cantarán su alabanza,

los que sin tino adulan harán ángel al diablo:

Yo que soy desgraciado, lloraré en mi desgracia.

 

De "Les Regrets" 1558

Visor 1985

Versión de Luis Antonio de Villena

 

 

 

No escribo ya de amor, no estando enamorado...

 

No escribo ya de amor, no estando enamorado,

no escribo de belleza, pues yo no tengo amada,

no escribo de dulzor, gustando la rudeza,

no escribo de placer, hallándome en dolores:

 

no escribo de la dicha, pues que soy desgraciado,

no escribo de favor, no viendo a mi princesa,

no escribo de tesoros, no teniendo riquezas,

no escribo de salud, siendo ya melancólico:

 

no escribo de la Corte, tan lejos de mi príncipe,

no escribo de Francia, en ajena provincia,

no escribo del honor, pues que aquí no lo encuentro:

 

no escribo de amistad, hallando fingimiento,

no escribo de virtud, si tampoco la veo,

no escribo de saber, entre gentes de Iglesia.

 

De "Les Regrets" 1558

Visor 1985

Versión de Luis Antonio de Villena



No pienses, Robertet, que esta Roma de ahora...

 

                                                                        Florimond Robertet, Barón de Alluye.

                                          Cortesano francés, amigo de Do Bellay y de Ronsard.

                                                   Se sabe que estuvo en Roma -al menos- en 1555.

 

No pienses, Robertet, que esta Roma de ahora

es aquella otra Roma que te placía tanto.

No dan crédito ya, como solían darlo,

ni se hace ya el amor como entonces se hacía.

 

Ni paz ni bonanza gobiernan ya aquí,

la música y la danza han debido pararse,

corrompido está el aire, y es Marte quien manda,

la turbación, la pena y el hambre cada día.

 

El corrompido artesano ha cerrado su tienda,

el ocioso abogado abandonó el oficio,

y el pobre mercader lleva solo talega:

 

No ves sino soldados, morrión a la cabeza,

sólo tambores oyes o parejo estruendo,

y Roma cada día espera otro saqueo.

 

De "Les Regrets" 1558

Visor 1985

Versión de Luis Antonio de Villena

 

 

No quiero escudriñar de la natura el fondo...

 

No quiero escudriñar de la natura el fondo,

no quiero rebuscar la esencia universal,

no quiero sondear los abismos cubiertos,

ni dibujar del cielo la hermosa arquitectura.

 

No pinto yo mis lienzos con tan rica pintura,

y argumentos tan altos no los busco en mis versos:

Mas del lugar siguiendo los accidentes varios,

sea del bien o del mal, escribo a la ventura.

 

A mis versos les lloro, si tengo una tristeza:

y me río con ellos y les cuento el secreto,

pues son del corazón muy fieles secretarios.

 

Así es que no pretendo peinarlos o adornarlos,

ni con sonoros nombres los quiero disfrazar

sino de notas íntimas o propios comentarios.

 

De "Les Antiquités de Rome" 1558

Visor 1985

Versión de Luis Antonio de Villena

Tomado de:

http://amediavoz.com/bellay.htm

 

 

NO APETEZCO HOJEAR LOS GRIEGOS EJEMPLARES…

 

No apetezco hojear los Griegos ejemplares,

ni volver a escribir con los trazos de Horacio,

ni aún menos imitar de Petrarca la gracia,

o la voz de Ronsard, en mis Lamentaciones.

 

Los que en verdad de Febo son poetas sagrados

gustarán en sus versos de una mayor audacia:

A mí, que me agita un furor más liviano

apenas entro algo en secretos tan vastos.

 

Y me contentaré con decir llanamente

lo que escribir me haga tan solo la pasión,

sin buscar más allá más graves argumentos.

 

No he intentado pues imitar en mi libro

a los que en su escritura se glorian de otra vida

y de quedarse vivos fuera del monumento.

 

Lamentaciones, 1558. Traducción de Luis Antonio de Villena.

Tomado de:

https://poeticas.es/?p=3469

 

Soneto XXXI – Feliz quien como Ulises…

 

 Feliz quien, como Ulises, fin da a su travesía,

o como el argonauta que conquistó el toisón,

y de regreso, lleno de experiencia y razón,

entre los suyos vive el resto de sus días.

 

¡Ay! ¿Cuándo hacia mi aldea retornaré la vía?

(La chimenea espera, humeando), ¿en cuál sazón

veré otra vez las vallas de mi pobre mansión,

esa provincia íntima que a nada más se alía?

 

Me place más la casa que hicieron mis abuelos

que los audaces frontis en el romano suelo.

Me placen no los mármoles, sino pizarra fina.

 

Más mi Loira de los galos que el Tíber de latinos;

Más mi aldea, Liré, que el monte Palatino;

Más que el aire de mar, la dulzura angevina.

 

(Traducción de Juan Carlos Sánchez Sottosanto)

Tomado de:

http://lenguavempace.blogspot.com/2017/08/sonetos-de-joaquin-du-bellay.html

 

 

 

 

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