miércoles, 24 de febrero de 2021

POEMAS DE RUSSELL EDSON


(1935, Connecticut / 29 de abril de 2014, Stamford, Connecticut, Estados Unidos)


CONTAR OVEJAS

 

            Un científico tiene un tubo de ensayo lleno de ovejas. Se pregunta si debería tratar de reducir para ellas una pradera.

            Son como granos de arroz.

            Se pregunta si es posible reducir algo hasta que deje de existir.

            Se pregunta si las ovejas serán conscientes de su pequeñez, si tendrán algún sentido de la escala. Quizá crean que el tubo de ensayo es un establo de vidrio...

            Se pregunta qué debería hacer con ellas; sin duda tienen menos carne y lana que las ovejas corrientes. ¿Habrá hecho decrecer su valor comercial?

            Se pregunta si podrían usarse como sustitutos del arroz, una especie de arroz lanoso...

            Se pregunta si no debería de restregarlas entre los dedos hasta convertirlas en una pasta roja.

            Se pregunta si estarán reproduciéndose, o si alguna de ellas habrá muerto.

            Las coloca bajo un microscopio, y se queda dormido contándolas.

 

 

EL OTOÑO

 

            Érase un hombre que encontró dos hojas y entró en casa sujetándolas con los brazos extendidos diciéndole a sus padres que era un árbol.

 

            A lo que ellos respondieron sal al jardín y no crezcas en el cuarto de estar porque tus raíces podrían echar a perder la alfombra.

 

            Les dijo estaba haciendo el tonto no soy un árbol y dejó caer las hojas.

 

            Pero sus padres dijeron anda mira estamos en otoño.

 

 

SIMIO

 

            No te has terminado tu simio, le dijo madre a padre, que tenía pelo de mono y sangre en las barbas.

            Suficiente mono, gritó padre.

            No te comiste las manos, y me tomé la molestia de hacer aritos de cebolla para los dedos, dijo madre.

            Picaré un poquito de su frente, y después será suficiente, dijo padre.

            Le he rellenado la nariz con ajo, tal y como te gusta, dijo madre.

 

            ¿Por qué no haces que el carnicero te trocee estos simios? Lo pones entero en la mesa cada noche; el mismo cráneo fracturado, la misma piel chamuscada, como alguien que hubiera muerto horriblemente. Esto no son cenas, son disecciones post-mortem.

 

            Prueba un pedacito de encía, le he rellenado la boca de pan, dijo madre.

            Agh, parece una boca llena de vómito. ¿Cómo voy a hincarle el diente a la mejilla con el pan derramándosele de la boca? gritó padre.

            Parte una de las orejas, están tan crujientes, dijo madre.

 

            Daría lo que fuera por que les pusieras calzoncillos a estos simios; aunque fuera un suspensorio, aulló padre.

            Padre, cómo te atreves a insinuar que veo al simio como algo más que simple carne, aulló madre.

            Bueno, ¿qué hay de esa cinta atada en un lazo en sus partes nobles? aulló padre.

 

            ¿Estás diciendo que estoy enamorada de esta criatura inmunda? ¿que rendiría mi abertura de mujer a esta bestia? ¿Que después de que hubiéramos hecho el amor en el suelo de la cocina lo metería en el horno, tras romperle la cabeza con una sartén; y que se lo serviría después a mi marido, para que mi marido se comiera las pruebas de mi infidelidad...?

 

            Solo digo que estoy jodidamente harto de cenar simio cada noche, gritó padre.

 

 

UNA REPRESENTACIÓN EN EL TEATRO DE LOS PUERCOS

 

            Había una vez un teatro de los puercos en el que los puercos actuaban como hombres, si los hombres hubieran sido puercos.

 

            Un puerco dijo: seré un puerco en un campo que ha encontrado un ratón que está siendo devorado por el mismo puerco que está en el campo y que ha encontrado al ratón, el cual estoy representando como parte de mi contribución al arte de la actuación.

 

            Oh seamos puercos sin más, gritó un viejo puerco.

 

            Y así los puercos salieron en tropel del teatro gritando, solo puercos, solo puercos...

 

 

UN DESAYUNO HISTÓRICO

 

            Un hombre se está acercando una taza de café al rostro, inclinándola hacia su boca. Es histórico, piensa. Se rasca la cabeza: otro suceso histórico. Realmente debería descansar, está haciendo un tremendo montón de historia esta mañana.

            Ay Dios, ahora está untando mantequilla en la tostada, otro pedazo de historia se está forjando.

            Se pregunta por qué habrá recaído en él lo de ser tan histórico. Probablemente los demás simplemente no estén a la altura, piensa, es, después de todo, un talento.

            Se le ocurre que uno de sus cordones necesita que lo aten. En fin, otro importante suceso histórico está a punto de tener lugar. Sencillamente no puede evitarlo. ¿Quizá esté comprometiendo un área demasiado grande de la historia? Pero tiene que vivir, ¿no? Las tostadas necesitan mantequilla y uno no puede ir por ahí con uno de sus cordones necesitando ser atado, ¿no?

            No hay ninguna duda, cuando escriban acerca de todo el siglo XX este tratará sobre todo de él. No hay más tu tía. Ah, he ahí la frase que será citada durante los siglos que vendrán.

            ¿Cohibido? Un poco; como no iba a estarlo con todos esos aún no nacidos ojos del futuro observándolo?

            Oh oh, percibe otro suceso histórico aproximándose... Ah, aquí está, una taza de café acercándose a su rostro desde el extremo de su brazo. Si tan solo fueran capaces de grabarlo en video, qué importancia tendría para el futuro. Ups, se lo ha tirado todo por el regazo. Uno de esos accidentes históricos que ejercerán su influencia los próximos mil años; impredecible, y realmente bastante molesto... Pero la historia no es cosa fácil, piensa...

 

PADRE PADRE, ¿QUÉ ES LO QUE HAS HECHO?

 

            Un hombre sentado a horcajadas en lo alto de su tejado grita, arre. La casa se levanta sobre el porche trasero y todos los ladrillos se desmoronan y la casa se derrumba sobre el suelo.

            Su mujer grita desde los escombros, padre padre, ¿qué es lo que has hecho?

 

(Traducción de Andrés Catalán)

Tomado de:

http://lemonocledemononcle.blogspot.com/2018/12/nueve-poemas-de-russell-edson.html

Autopsia

 

En un cuarto trasero un hombre realiza la autopsia de un viejo impermeable.

Su mujer aparece en el vano de la puerta con una lámpara y pregunta ¿cómo va eso?

Aún falta, aún falta, todavía voy por el forro, murmura él con impaciencia.

Sólo quiero saber si has encontrado algún coágulo de sangre.

¿Un coágulo de sangre?

Para mi collar.

 

Los filósofos

 

Pienso, luego existo, dijo un hombre, y de inmediato su madre le dio un golpe en la cabeza diciendo le doy un golpe en la cabeza a mi hijo, luego existo.

No, no, lo entiendes todo mal, gritó el hombre.

Entonces ella le dio otro golpe en la cabeza y gritó luego existo.

No es así, no es así; se supone que tienes que pensar, no dar golpes en la cabeza, gritó el hombre.

 

…Pienso, luego existo, dijo el hombre.

Doy golpes en la cabeza, luego ambos existimos, el que los recibe y el que los da, dijo la madre del hombre.

Sin embargo, llegados a este punto el hombre había dejado de existir; inconsciente, ya no podía pensar. Pero su madre sí podía. Entonces pensó, luego existo, y luego soy mi hijo inconsciente, aunque él no lo sepa.

 

Russell Edson (Connecticut, Estados Unidos, 1935-2014)

Versiones de Jonio González para este blog

Tomado de:

https://campodemaniobras.blogspot.com/2011/01/russell-edson-tres-poemas-3.html

 

EL AUTOMÓVIL

 

   

     Un hombre se acababa de casar con un automóvil.

 

     Lo que quiero decir, dijo su padre, es que el automóvil no es una persona porque es algo diferente.

     Por ejemplo, compáralo con tu madre. ¿Ves cómo es diferente a tu madre? Parece como más ancho ¿verdad? Y por otra parte, tu madre lleva el pelo diferente.

     Tienes que intentar encontrar algo en el mundo que se parezca a tu madre.

 

     Ya tengo una madre, ¿no es eso ya bastante en cuanto a cosas que se parezcan a una madre? ¿Tengo que recolectar más madres?

     Todas son ancianas que no excitan en lo más mínimo el deseo de procrear, dijo el hijo.

 

     Pero no puedes procrear con un automóvil, dijo el padre.

 

     El hijo muestra al padre una llave de contacto. Mira, esto es un pene especial que hace con el automóvil lo que un hombre con la mujer; y entonces el automóvil da a luz un lugar lejos de este lugar, dejando caer sus millas recién nacidas por el camino.

 

     ¿Me convierte eso en abuelo? dijo el padre.

 

     Eso te deja a ti donde estás cuando yo estoy lejos, dijo el hijo.

 

     Padre y madre miran un automóvil con un letrero donde pone recién casados que se hace más pequeño en una carretera.

Tomado de:

http://ismaelbelda.blogspot.com/2014/04/cuatro-poemas-de-russell-edson_11.html

 

Hierba

 

   La sala de estar está invadida por hierba. Ha surgido alrededor de los muebles. Se extiende a través del comedor, pasando la puerta vaivén hacia la cocina. Se extiende por millas y millas a través de las paredes…

 

   Hay tesoros en la hierba, cosas caídas o puestas allí; un palo oxidado que alguna vez fue una navaja, una lápida… Todo escondido en la hierba en el cuero cabelludo del prado…

 

   En un sótano bajo la hierba un anciano se sienta en una mecedora, meciéndose de un lado a otro. En sus brazos sostiene a un niño, el cuerpo infantil de sí mismo. Y se mece de un lado a otro bajo la hierba en la oscuridad…

 

 

 

 [ de The Intuitive Journey  (1976) ]

 

Las marionetas de amos lejanos

 

 

Un pianista sueña que es contratado por una compañía de demolición para destruir un piano con sus dedos... El día del concierto de la demolición del piano, mientras se arregla, se da cuenta de que en su jardinera una mariposa molesta a una flor. Se pregunta si debería llamar a la policía. Piensa entonces que quizá la mariposa solo sea una marioneta manipulada desde la ventana de arriba por su amo. De pronto, todo es hermoso. Comienza a llorar. Entonces otra mariposa empieza a molestar a la primera. Y de nuevo se pregunta si no debería llamar a la policía. Pero tal vez sean marionetas en forma de mariposas. Él piensa que lo son, de amos rivales que observan cuál de las mariposas puede molestar más a la otra. Y todo esto está sucediendo en su jardinera. El Plan Cósmico: Amos Lejanos manipulando a Amos Menores, quienes, a su vez, lo están manipulando a él... ¡Un universo urdido con hilos! De pronto, todo es tan hermoso; la luz es diferente... ¡Algo acerca de la luz! Comienza a llorar. ~

Tomado de:

http://184.72.35.63:8080/revista/poemas/dos-poemas-23

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