LA FALTA DE RESPONSABILIDAD SOCIAL DE ALGUNOS ÍDOLOS
Notas sin moralismo
No deseo aquí pontificar, ni hacer un tratado de moral; solo quiero aprovechar la oportunidad que me da el reciente resbalón del gran jugador Arturo Vidal, quien de igual manera que en otro tiempo lo hicieran otras estrellas futboleras, ha dejado ver su peor cara.
Y es que al parecer el fútbol tiene cierto imán, para atraer a cierta fauna, que opta siempre por personajes oscuros, y que dejan ver lo peor del ser humano. Sea este un momento para reflexionar, si en verdad se les debe dar tanta libertad, a personajes que desean erigirse como ídolos de la juventud mundial, y lo hacen como otrora lo hiciera el vulgar Maradona, y su corte de fiesteros, que pretenden hacerse inolvidables izando su lado más oscuro, y su peor cara, como lo hicieran los poetas románticos, y los malditos.
Dan a entender que la genialidad debe ser precedida por el aura de lo anti-social, convirtiendo a estos supuestos héroes, en una caterva de delincuentes adinerados, que con las manos llenas de dinero están dispuestos a quebrar cuanta regla encuentren en su camino, y a pasar por encima de la autoridad, creyéndose dioses, y dando un pobre ejemplo a quienes en el futuro, ven que el valor mayor no está en el deporte en sí, sino en la posibilidad del dinero y la fama fácil, convirtiéndose en una moral, y un ejemplo tan repugnante como la cultura mafiosa que tanto decimos odiar en América Latina.
Sea este el momento de llamar a deportistas, dirigentes y aficionados a comprometerse en la formación de estos deportistas de alto rendimiento; no solo en la parte física, sino como sujetos sociales que realmente aporten a la construcción de valores de humildad, igualdad, y que sus cabezas sirvan para algo más que dar cabezazos a los balones.
Aun no es tarde, para que los jóvenes corrijan su camino, y no piensen que lo único que es legítimo es lo que compra el dinero.
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