martes, 2 de noviembre de 2021

POEMAS DE WERNER ASPENSTRÖM

 

(13 de noviembre de 1918, Dalarna / 25 de enero de 1997, Estocolmo, Suecia)



HUELE A QUEMADO

 

Será probablemente el talentoso hijo del caníbal

Que está asando un mosquito en la llama de la vela

Mientras sueñas con instalaciones más amplias.

¡Como las pirámides!

¡La muralla china!

¡El pentágono!

Y nunca más una hoja verde en la tierra.

 

 

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SOBRE COSAS ASÍ

 

 

 

No es la energía nuclear como tal

 

ni el problema de los residuos en sí

 

ni los expertos técnicos como cuentos

 

ni las garantías de los administradores de que

 

Los constructores saben en qué se han metido

 

y pueden y deben ser ser ser

 

si la alarma comienza un reparto

 

Y una cosa así.

 

No es eso, no es eso.

 

 

Es la política paulatina como tal.

 

camino de la locura totalmente desarrollada como tal.

 

 

 

Traducción: Francisco J Uríz.

Tomado de:

https://www.lamajadesnuda.com/92-poesia-y-medio-ambiente/465-werner-aspenstroem.html

 

EL AMOR Y LA MUERTE

 

 

Sucede. El bosque permite que suceda.

Las hojas amarillean y caen.

Es así. Remolinos de viento se las llevan.

También se nos llevan a nosotros. Es así.

Yo no puedo cambiarlo.

Los saltos de la cabra montés

de saliente en saliente –el último,

mal calculado, ¿quién intervendrá?

Jamás oí al bosque reclamar

sus hojas amarillas. El viento se las lleva.

Es así.

Pide algo que yo pueda darte: besos,

un abrigo de invierno nuevo, sinceridad.

Pídeme sinceridad.

El que susurra en tu reluctante oído

no es Dios,

es tu viejo osito de trapo,

es el recuerdo de la abuela y la eternidad

 ajo un tilo envuelto en el zumbido de los abejorros.

Lo que me persigue día y noche

no son los demonios,

sino la muerte más vulgar: la mía.

Sobre nosotros dos ningún Eurípides

escribirá una tragedia.

Nuestro amor fue imperfecto,

pero al ser arrastrados por el viento

nuestras manos todavía se buscarán mutuamente.

Caen las hojas al suelo.

Lo que para algunos es un bello camino

es para otros un vómito de sangre.

Sobre la alfombra roja pone el ciervo

la pezuña y la liebre la pata.

Juntos amamos el árbol,

pero el árbol nos deja vivir,

nos deja morir. Es así.

Yo no puedo cambiarlo.

Es así.

 

LA SARDINA EN EL METRO

 

 

No quiero lavarme con ese jabón.

No quiero lavarme los dientes con esa pasta dentífrica.

No quiero dormir en ese sofá cama.

No me hace ninguna falta ese papel higiénico.

No me interesa esa póliza de seguros.

No tengo la menor intención de cambiar de marca de cigarrillos.

No tengo ninguna gana de ver esa película.

Me niego a bajarme en Skärholmen.

 

 

La sardina quiere que se abra la lata hacia el mar.

LA SARDINA EN EL METRO

Tomado de:

http://apologadelaluz-jorgeespina.blogspot.com/2011/09/werner-aspenstrom-poemas.html

 

tu y yo y el mundo

 

No preguntes quien eres y quien soy yo

y porque todo lo es.

Deja que los profesores se encarguen de esto

porque se les paga.

poner la balanza de la casa sobre la mesa

y deja que la realidad se pese.

Ponte el abrigo.

Apaga la luz de entrada.

Cierra la puerta.

Deja que los muertos embalsamen a los muertos.

 

Estamos caminando aquí ahora.

¿Qué lleva botas de goma blancas?

eres tu.

¿Qué lleva botas de goma negras?

soy yo.

Y la lluvia que cae sobre los dos

es la lluvia.

 

  Traducción de Vasco Graça Moura

 

 

domingo

 

Por la sencilla razón de que nunca volverá

hoy es un día memorable.

El sol salió por el este y se puso por el oeste,

dejó el cielo a las estrellas

y una nave espacial nadando en el espacio.

La radio habló y cantó a través de la ventana abierta

detrás de las inmutables perlagones rojos.

Una mujer estaba recogiendo racimos de grosellas con unas tijeras.

y los llevé a la cocina.

 

En Poemas recopilados de 1943. 1997

Tomado de:

https://poemargens.blogspot.com/2019/03/werner-aspenstrom.html

 

 

Poesía

 

La rosa fugitiva

en la mano fugitiva,

en la poesía fugitiva.

Te sientas con el alfabeto.

El gato está cómodo y ronronea.

Y tú estás sentado entre montones de libros.

 

 

La luna

 

Algunos dicen que la luna es un joven pescador

que arrastra sus redes de arenques sobre el agua.

Otros dicen que es la viuda de un viejo pescador

que con agujas rutilantes teje el chal de la soledad.

No sé. Estoy asombrado por tanta inmovilidad.

Me asombra que la noche se haya detenido.

Tomado de:

https://campodemaniobras.blogspot.com/2017/05/werner-aspenstrom-dos-poemas.html

 

 

Los perros

 

La noche es inmensa.

Los cielos giran en silencio.

La luna navega con proa helada.

Estos perros aulladores

¿Qué es lo que buscan?

Aquel a quien se le erizan los pelos,

el que lloriquea como un niño,

el que enciende la chispa

de una estrella - son impotentes,

su sed no se puede apagar aquí.

¿Por qué, entonces, deambulan a lo largo de los valles?

y sobre los campos sembrados de cráteres?

¿Qué buscan en las cuevas de la montaña?

y en las ciudades abandonadas?

Aquí solo quedan lagartijas con pieles de cuero

y las estrellas y la noche es vasta

y los cielos se vuelven en silencio.

Tomado de:

http://johnirons.blogspot.com/2013/03/poem-by-swedish-writer-werner-aspenstrom.html

 

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